miércoles, 29 de junio de 2016

Volverse absolutamente libre

Volverse absolutamente libre



En El mito de Sísifo, el filósofo Albert Camus comparaba a los seres humanos con la figura mítica de Sísifo, condenado por Zeus a hacer subir una enorme piedra por la ladera de una montaña una y otra vez. Cuando alcanzaba la cima, la piedra caía rodando sin remedio, por lo que la tarea se convertía en un suplicio sin fin. Ciertamente, no fue Sísifo el único sometido a tan duro castigo. También Atlante, Ixión, Tántalo o las danaides pasaban sus días, tal y como narran los mitos griegos, en quehaceres absurdos, impuestos por Zeus y los dioses olímpicos para aquellos que osaban oponerse a ellos.

Lejos de los mitos pretéritos, también nosotros nos enfrentamos en nuestro día a día a tareas carentes de motivación, cual si nos fueran impuestas por los dioses. Como dirían los filósofos existencialistas, el mundo en el que vivimos es un lugar que nos precede en existencia: ahí está y ahí estaba ya antes de que nosotros llegáramos, y por eso tenemos que jugar a su juego, con sus reglas. Y ese juego es muy a menudo monótono, incluso absurdo. Este mundo, y su juego, limita nuestra libertad, nos anula. Es un mundo que puede llegar a ser vivido como inauténtico, irrelevante, sin sentido para quienes lo habitan. Pero es entonces cuando algunos de nosotros nos rebelamos, nos negamos a aceptar tal yugo. En busca de la libertad que se nos niega, subimos a la montaña y decidimos, aunque sólo sea por unas horas, una vida auténtica, una vida plena. Quizá esta decisión pueda llegar a costarnos la vida, pero lo que confiere sentido a la existencia, nos recuerda Camus, es precisamente aquello por lo que estamos dispuestos a entregar nuestras vidas. Aunque, cierto es, tarde o temprano la gran piedra vuelve a rodar ladera abajo, obligándonos a regresar de nuevo a nuestra rutina diaria. Sonríe entonces. No desfallezcas. Volver a subir será inevitable.

Contemplando la masa informe de granito que desde el Almanzor se postra ante nuestros pies tras coronar la cima (27/10/2013).

No hay comentarios:

Publicar un comentario